José Antonio Fernández - Aficionado

Un caluroso y aburrido domingo de 1982 sirvió para empezar a disfrutar de las carreras de Fórmula 1. Recuerdo que al decir a mi padre que estaba aburrido me invitó a sentarme con él a ver el Gran Premio de Canadá. Y aunque yo repliqué que aquello era igual de aburrido, puesto que sólo eran coches dando vueltas, él supo enseñarme algunos trucos para no ver así la Fórmula 1.

Nelson Piquet ganó ese triste GP de Canadá de 1982

Reconozco que luego, más por curiosidad que por interés, seguí viendo la temporada aquel año con la ayuda de mi padre, que me fue enseñando las claves de la clasificación, paradas en boxes, penalizaciones... Teniendo en cuenta que antes no había todo el apoyo que hoy tenemos desde el mundo digital, no fue una tarea fácil. Además de la Fórmula 1, durante varios años seguí atentamente el desarrollo del mundial de motociclismo. Pero sin duda, la Fórmula 1 había despertado en mí una pasión, algo que haría que durante los años posteriores me interesara mucho más por ella que por cualquier otra categoría.

Hasta hoy he seguido atentamente la evolución de escuderías, pilotos, monoplazas, circuitos. Apasionado por la técnica que rodea este mundo y ya ayudado por la red en 1996 comencé a escribir a título personal en mi blog. Intrigado por la técnica observaba como Internet se iba tornando una herramienta casi fundamental para seguir, no sólo la Fórmula 1, sino todo el resto de competiciones del motor.

Alex Zanardi pilotando el Winfield-Williams en Hungaroring 1999

Tras diez años de inquietudes y buscando un medio donde los aficionados al mundo del motor, pero principalmente los seguidores de la Fórmula 1, tuvieran un lugar de reunión y discusión y, aprovechando el magnífico momento de salud que esta categoría gozaba en los medios de comunicación españoles, decidí fundar un foro. Un foro que se convirtió casi en un modo de vida puesto que dediqué muchas horas a su funcionamiento.

Los amigos de ClubF1 durante la pretemporada de 2010 en el Circuito Ricardo Tormo

Hoy por hoy sólo sigo detenidamente la Fórmula 1. Principalmente por mi escaso tiempo libre y además por el desconocimiento del resto de categorías del motor. Sin embargo, sí que me detengo a mirar las evoluciones de los pilotos españoles, de los cuales tenemos una buena cantera, aunque ahora mismo vivamos una época donde “el dinero es más importante que las manos”.

Son 30 años ya pegado al mundo del motor con una valoración global excelente. Espero seguir durante muchos años mas dando guerra.